Todos nos reímos de esos nombres de pueblos que llenan nuestra geografía patria. No los mencionaré para no herir susceptibilidades, porque el lugar de nacimiento no lo elegimos nosotros y los naturales de El Pardillo o Matapuerca bastante desgracia tienen ya.
Este escrito les desagraviará al saberse que el hermano mayor de todos los países se gasta también unos nombres de espanto. Yo quería haberme reído a modo buscando topónimos ridículos en los EE.UU. pero es tarea inacabable. Así es que me ceñiré a un puñado, como si el puñado y yo estuviéramos bailando un pasodoble.
Hay allí topónimos (no ya de poblachos, sino de ciudades de más de 5.000 habitantes) que están pidiendo a gritos que alguien los ponga todos juntos, en la misma comarca, porque tienen una exagerada similitud.
Por ejemplo, de tema grecolatinístico, ya que existen ciudades llamadas Arcadia, Hércules, Fortuna, Júpiter o Hesperia.
O ciudades que, por lo que su nombre indica, deben de ser más bien pequeñitas: Cerritos, Encinitas, Lomitas, Alamitos.
No es que quiera yo hacer el chiste fácil de que los americanos son unos tarugos, pero el caso es que los nombres más abundantes se refieren a la industria de la madera. Helos aquí: Carpintería, Alta Sierra, Madera, Brea, Corte Madera, Palo Alto, El Cajón, Fresno, La Mesa, Madera Acres (hay más).
Muchos añaden el sufijo ‘-ville’, «villa», a cualquier tipo de nombre, como Placerville o Vacaville.
Hay ejemplos curiosos, como la ciudad llamada Normal, que parece estar pidiendo perdón. (Ya saben, aquello de «Excusatio non petita acusatio manifesta.»)
En los EE.UU. hay como treinta ciudades o más que se llaman París.
A mí esto me gusta y propongo que, para no ser menos que ellos, rebauticemos a algunas de nuestras poblaciones con nombres de este jaez.
Ellos tienen una ciudad llamada Marlboro, con el nombre de una industria nacional; nosotros podríamos tener Chupa-Chups.
Inventemos nuestros topónimos basándonos en nuestras ideas. Aquí listo algunos de los temas que les inspiraron y la ciudad de los EE.UU. resultante, seguida del nombre que propongo para las nuestras.
Personaje histórico: Napoleón — Wifredo el Velloso
Exclamación: Socorro — ¡Córcholis!
Ex-presidente: Clinton — Rajoy
Ex-presidente antiguo: Roosevelt — Pí y Margall
Hito histórico: Independence — Desamortización de Mendizábal
Denominación política: Liberal —De derechas de toda la vida
Nombre de persona: Rupert — Gumersindo
Fauna local: Reno — Conejo
Fruta local: Orange — Altramuz
Industria boyante: Gas City — Turisburgo
Nombre de película: Troy — Atraco a las tres
Ciudad de una secta: Quackertown — Opusdeiburgo